En Santorini, estamos orgullosos de tener el concepto de “Slow Food”, -no como la traducción literal de “comida lenta”-, si no que ser parte de la causa y organización global del mismo nombre, que ya tiene casi 30 años de historia, fundada para prevenir la desaparición de las culturas y tradiciones gastronómicas, contraria al crecimiento del estilo de vida acelerado, y que se preocupa de combatir el desinterés de la gente sobre la comida que come, -sin saber el cómo se obtuvo y de dónde viene-, y cómo nuestras elecciones gastronómicas influyen en el mundo en que vivimos.

En este restaurante abrazamos el concepto griego de Εστία, orientado a compartir en torno a la buena mesa, y dejar un poco el ritmo vertiginoso de la vida actual, -que también se traspasa a la gastronomía, con platos en “serie”- y sin una verdadera preocupación por el producto, ni respeto por su historia y preparación. Definimos a Santorini como una “cocina del alma “, donde nuestro equipo crea a diario platos hechos a la minuta, intentando traspasar en nuestras preparaciones el cariño y la pasión por lo que hacemos y entregar una experiencia gastronómica completa.